La pérdida del trabajo no es una buena experiencia, pero si sucede después de los 50 años, puede ser más problemático, ya que será más complicado ser recontratado. Existen varios datos que demuestran este problema que afecta a nuestra sociedad.
La última Encuesta de la Población Activa (EPA) arroja una cifra de casi medio millón de parados mayores de 55 años en España, cerca del doble de los que existían hace diez años. Por otra parte, un análisis de la Fundación Adecco señala el incremento de la proporción de desempleados mayores sobre el total: en 2008 suponían el 6,9%, y hoy ya representan el 15% de las personas que buscan empleo en España. Además, un 15% de estas personas superan los 55 años y se estima que en 2025 los seniors aumenten un 20,5%.
En definitiva, hay muchas personas por encima de los 50 años que quieren trabajar y que pueden sentirse discriminadas por su edad. Cuando la realidad es que estas personas pueden aportar experiencia, flexibilidad y capacidad analítica.
Suelen ser profesionales con mucha experiencia y algunos muy cualificados, acostumbrados a gestionar la complejidad; pero que, al enfrentarse a un cambio profesional, se ven inmersos en una alta emocionalidad. Esto puede no ayudar para enfocar la situación. Superar la confusión y pasar a la acción de una manera serena es el primer paso.
Es imprescindible una reflexión personal en lo profesional para reconocer las propias competencias y la experiencia acumulada. Además, se ha de saber expresar lo que se ofrece como profesional, y tener la capacidad de comunicarlo eficazmente.
El informe Estudio sobre la curiosidad en el trabajo, elaborado por InfoJobs y por el Future for Work Institute, asegura que el rendimiento, la capacidad de trabajo y la relación con los demás son aspectos que se ven influidos por la curiosidad, y ésta podemos cultivarla a cualquier edad. Hoy las organizaciones deben tener claro que el talento, la contribución y la empleabilidad no dependen de la edad biológica, sino de la actitud de cada persona.
Estas son algunas claves para encontrar empleo y ser recontratado después de los 50 años.
Actualiza tu CV y apuesta por la innovación
Prepara un diseño innovador para tu currículum, rompe con los estereotipos y sorprende con un CV a la última. Incluye gráficos que indiquen tu nivel de experiencia en las áreas que más domines o en los idiomas que mejor hables. También puedes utilizar módulos que separen las partes del documento. Esto lo hará más visual y cómodo de leer. Otra manera de actualizar tu CV es haciendo un vídeocurrículum. Escribe un guion con todas las ideas que tengas. Habla de ti, de tu formación y experiencia, de tus aptitudes y despídete ofreciendo tus redes sociales.
Digitalízate
La formación de los trabajadores en competencias digitales mejora la empleabilidad en personas con mayor probabilidad de exclusión laboral (a partir de los 50 años) y la transformación de todas aquellas personas con trabajos analógicos al nuevo entorno de la economía digital.
Muéstrate activo en las redes sociales
Es importante para demostrar que estás al día, que te muestres activo en redes sociales. LinkedIn es un portal esencial para encontrar trabajo. Cuida tu perfil e intenta crear una buena red de contactos. También es conveniente que identifiques a personas que trabajan en las compañías que te gustan, las sigas en redes sociales y comentes algunas de sus publicaciones.
Prepara bien cada entrevista
Has actualizado tu currículum y tienes las redes sociales listas. Ahora toca prepararse para las entrevistas físicas o virtuales y necesitarás algunas recomendaciones:
- Infórmate sobre la empresa: Es una señal de interés por tu parte y podrás hacerte una idea de lo que esperan de ti.
- Haz un resumen de tu vida laboral: Selecciona los mejores momentos y dale tu toque personal a la hora de contarlo.
- Resalta tus logros: Eres un sénior, explica las metas que ha sido alcanzando a lo largo de los años.
- Explica lo que esperas de esta oportunidad: Explica que es lo que realmente te motiva de ese nuevo proyecto.
Mantén una actitud optimista
No te dejes desanimar por los estereotipos, porque estos están para romperse. No te desanimes y demuestra que tienes las mismas ganas de aprender que cuando eras un veinteañero. Tener una mentalidad positiva contribuirá a soportar el esfuerzo que implica buscar trabajo y te ayudará a encontrarlo.
Utiliza tus contactos
Tener más de 50 años y haber trabajado durante tanto tiempo tiene la ventaja de contar con una agenda muy completa y variada. Recurrir a tus contactos te ayudará a mover tu currículum y a mantenerte informado de las entrevistas o plazas que se oferten.
