En el momento en el que se alcanza cierta edad y los niveles de dependencia en la vida diaria aumentan, una posible solución para ello son las residencias de mayores. Conoce los aspectos que determinan el precio de una plaza.
A pesar de los estigmas que hay asociados a las residencias para mayores, la realidad es que proporcionan muchas ventajas. Ofrecen la oportunidad de establecer relaciones sociales, mantenerse activo y tener unas rutinas diarias, lo que redunda en el bienestar general de la persona. Si estás interesado en esta opción, ya sea para ti mismo o un familiar, quizás ahora una de tus preocupaciones sea su coste. Pero ¿de qué depende? A continuación, te contamos qué tienes que tener en cuenta a la hora de escoger una residencia de mayores con una buena relación entre precio y calidad.
¿Qué factores condicionan el precio?
A la hora de escoger el centro, el principal aspecto que determina cuánto se ha de pagar es si se trata de uno público o uno privado.
En una residencia de mayores pública, es decir, aquellas cuya financiación proviene de instituciones públicas del gobierno, el precio depende de la cantidad de ingresos y de la pensión de la persona que vaya a ingresar en ella. Esto hace que sea difícil establecer un coste fijo. El porcentaje puede variar, aunque de media suele ser un 75% de los beneficios totales, asegurando que el residente tenga lo suficiente para gastos personales. Además, las plazas de las residencias se establecen según cada Comunidad Autónoma, y para poder obtener una hay que cumplir ciertos requerimientos decretados por la Ley de Dependencia. Así pues, es necesario realizar un trámite, que suele ser duradero, si se desea conseguir una plaza en alguna de ellas.
Existen ayudas económicas para facilitar el pago: las ayudas a la dependencia, las cuales, dependiendo del grado (dependencia moderada, dependencia severa o gran dependencia), pueden estar desde 300 € hasta 700 € al mes. Es importante tener esto en cuenta, ya que, gracias a estas ayudas, es posible disponer de algo de más de presupuesto para pagar una plaza.
En el caso de las residencias de mayores privadas, las cuales están gestionadas por empresas, hay menos requisitos que cumplir que en las públicas, pero uno de ellos es poder permitirse su coste. Por ello, es fundamental informarse bien de cuáles son los servicios de cada uno de los centros, como qué tipo de atención sanitaria ofrecen, las instalaciones o las diferentes servicios y actividades que ofrecen, para que así sepamos cómo de rentable es la residencia. Los precios son distintos en cada comunidad autónoma, y se encuentran entre los 1200 € y los 2600 €. El País Vasco y Navarra son las comunidades con los precios más elevados, mientras que en Castilla la Mancha y Extremadura los costes son los más bajos. Una diferencia que supera el 50%, siendo el precio más alto en el País Vasco y el más bajo en Castilla la Mancha. Para que podamos hacernos una idea, según el informe publicado por Inforesidencias.com el precio medio de una residencia de ancianos privada en España es de 1.830 €/mes sin IVA.
Pero el precio no depende sólo depende de las comunidades autónomas, sino que también influyen las dimensiones y la población de la localidad en la que se encuentre. En las ciudades más céntricas, especialmente Barcelona y Madrid, el coste siempre será más elevado que en residencias situadas en zonas rurales.
Además, el tamaño de las instalaciones también es otro de los aspectos a tener en cuenta, puesto que, cuanto más grandes sean, mayor será el coste del mantenimiento. Sin embargo, si es una residencia muy pequeña, el precio también puede aumentar debido a la poca capacidad y disponibilidad de habitaciones.Cómo de reformadas y adaptadas estén también pueden ser variables en la ecuación.
Debemos tener en cuenta que existen alternativas similares, como la ayuda a domicilio o los centros de día para personas mayores, que ayudan igualmente a la persona dependiente en cuestiones de salud y a mantener una vida activa e interacciones sociales con otra gente.
Elegir una residencia de mayores es una decisión importante, y no hay que tomarla a la ligera. Antes de escoger, considera bien todos los factores mencionados. Al final, lo más importante es que la persona se sienta cómodo y la vea como un hogar.