Tener una boca sana y unos dientes fuertes nos ayudará a masticar y procesar mejor los alimentos, favoreciendo la digestión y ayudándonos a mantener una buena salud general. Además, hará que disfrutaremos más del sabor de las comidas.
Las enfermedades de la boca o de las encías, o la pérdida de piezas dentarias, impiden la correcta masticación y salivación de los alimentos y dificultan el acto de comer.
Este test te permitirá identificar si existe algún problema en tu boca que pueda afectar a tu salud y a tu estado nutricional.
Herramienta elaborada por la Fundación Edad & Vida