Para los consumidores que son nuevos en el comercio electrónico, aventurarse a realizar la primera compra puede suponer un desafío si no conocen las mejores prácticas para comprar en línea de forma segura. Tal y como recuerda INCIBE (Instituto Nacional de Ciberseguridad), entre los riesgos y estafas más habituales asociados a las compras en línea encontramos el robo de datos personales al introducirlos en webs fraudulentas, las estafas económicas si facilitamos datos bancarios y el envío de artículos falsificados o en malas condiciones si no contrastamos la información o detalle de los artículos de la web. Y es que, para que nuestra compra sea segura, debe garantizarnos el respeto a la protección de nuestros datos personales y nuestros derechos como consumidores, la seguridad de las redes y dispositivos, así como la persecución de las conductas fraudulentas.

Por todo ello, hay una serie de recomendaciones a seguir antes de aventurarnos en nuestras adquisiciones online si queremos que el proceso sea un éxito.

El primer punto para considerar es que vale la pena investigar un poco las páginas web que nos han llamado la atención para comprobar que son comercios legítimos. Si nos dirigimos a organizaciones acreditadas, estas tendrán información en su sitio web sobre cómo manejan los datos personales (que solo deben usarse para cumplir con nuestro pedido y no compartirse con terceros). Si no son comercios conocidos, es aconsejable que busquemos las opiniones de otros usuarios, así como reseñas de organizaciones de confianza, como los sitios web para consumidores.