Cuando usamos Chrome como navegador y Google como motor de búsqueda, se está haciendo un seguimiento de todo lo que consultamos o hacemos en línea. Por eso, cuando miramos un determinado producto, nos inundan con anuncios de ese mismo producto, una y otra vez, instándonos a comprarlo. Y es que navegar sin las debidas precauciones permite que las cookies recopilen una cantidad significativa de datos personales que pueden ser usados para crear perfiles detallados, dirigir publicidad específica o, incluso, ser vendidos a terceros.

Los principales consejos que debemos seguir para una navegación segura son mantener el navegador y el sistema operativo al día, siempre actualizados a la última versión, configurar el navegador para que fuerce la versión segura de los sitios web y aprovechar las funciones de navegación privada para evitar el rastreo y el almacenamiento local de información.
Pero, además, debemos tener en cuenta que la navegación anónima es la práctica de navegar por Internet sin revelar información personal como nuestra identidad, ubicación, preferencias o cualquier dato que pueda usarse para rastrear nuestras actividades en línea. El objetivo es ocultar detalles identificables, como nuestra dirección de protocolo de Internet (IP), ubicación geográfica, información del dispositivo e historial de navegación.