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Por qué el envejecimiento no va asociado a la edad

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La edad que tenemos no está marcada solo por el día de nuestro nacimiento. Esta es nuestra edad cronológica. Pero también existe la llamada edad biológica, que se puede conocer con un sofisticado análisis que revela cómo está la salud de nuestro organismo. La diferencia entre la edad cronológica y la edad biológica varía mucho de unas personas a otras. Esto significa que todos no envejecemos al mismo ritmo, algunos tenemos una edad biológica mayor que la cronológica y viceversa. Entonces, ¿de qué depende el envejecimiento?

Aunque es alrededor de los 40 años el momento en el que comienza a dispararse la incidencia de las enfermedades asociadas al envejecimiento, la edad biológica comienza a separarse de la edad cronológica en cada persona en función de factores decisivos como la herencia genética y otros factores externos como son el estilo de vida que llevamos, la alimentación o la calidad del sueño, ya que influyen de forma decisiva en el desarrollo de nuestras células.

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La edad que tenemos no está marcada solo por el día de nuestro nacimiento. Esta es nuestra edad cronológica. Pero también existe la llamada edad biológica, que se puede conocer con un sofisticado análisis que revela cómo está la salud de nuestro organismo. La diferencia entre la edad cronológica y la edad biológica varía mucho de unas personas a otras. Esto significa que todos no envejecemos al mismo ritmo, algunos tenemos una edad biológica mayor que la cronológica y viceversa. Entonces, ¿de qué depende el envejecimiento?

Aunque es alrededor de los 40 años el momento en el que comienza a dispararse la incidencia de las enfermedades asociadas al envejecimiento, la edad biológica comienza a separarse de la edad cronológica en cada persona en función de factores decisivos como la herencia genética y otros factores externos como son el estilo de vida que llevamos, la alimentación o la calidad del sueño, ya que influyen de forma decisiva en el desarrollo de nuestras células.